El Rey del Pop tuvo que volver a los escenarios para pagar todas sus deudas. Sin embargo, tras su muerte, sus herederos han hecho mucho dinero.

Nicolas Cage ha comprado muchas excentricidades a lo largo de su vida. Pero su actual situación económica ya no puede solventar todo ello. Es por esta razón que Cage se ha visto obligado a vender sus propiedades, coches y yates.

Los excesos de Mike Tyson le jugaron una muy mala pasada. Si bien en el mejor momento de su carrera el pudo recolectar varios millones de dólares, en el 2003 el boxeador declaró que mantenía una deuda de 20 millones que no podía pagar.

“Los vigilantes de la playa” fue una serie de televisión sumamente exitosa en la década de los 90. Sin embargo, esa serie ya no se graba más. Desde ahí, Pamela Anderson no ha encontrado papeles memorables y por ello sus ingresos se han reducido hasta el mínimo. Algunas fuentes afirman que ella no cuenta ni con un dólar en sus cuentas bancarias.

Lindsay Lohan ha mantenido una vida muy agitada que la ha llevado incluso hasta la prisión. Obviamente, estas fiestas interminables han hecho que todo su dinero se consuma con facilidad.

Tras perder un juicio en el 1993, Kim Basinger fue obligada a pagar 6 millones de dólares. Ella tuvo que deshacerse de algunas propiedades para pagar esa cifra. Después de ello, la actriz anunció que se encontraba en bancarrota.

Whitney Houston tuvo problemas con las drogas. Esto la llevó a anunciar en el año 2006 que se encontraba en bancarrota.

El dinero que gana Lily Allen por su música le sirve para vivir cada día. Pero al parecer, ella no cuenta con ningún dinero ahorrado. Por eso, en una oportunidad, ella anunció que había vendido uno de sus coches para poder sobrevivir.

En 1998, Toni Braxton se declaró en bancarrota. Por ello, para cancelar una deuda de 3 millones de dólares, tuvieron que embargarle sus bienes.

En el 2004, el rancho de Don Johnson estuvo muy cerca de ser subastado. Por suerte, él pudo recuperar algo de dinero y logró juntar los 690 mil dólares que debía.