En el mundo del arte y del espectáculo la provocación suele ir ligada a la publicidad y, a mayor provocación, más publicidad suelen pensar algunos. En cualquier caso la industria discográfica se ha visto salpicada a menudo de supuestos escándalos provocados por muchas veces por algo tan trivial como la portada de un disco. A lo largo de la historia muchas han sido las carátulas de discos censuradas.