Whoopi Goldberg será siempre recordara por películas como El color púrpura, Ghost o Inocencia Interrumpida; pero también será recordada por llevar los peores vestidos en la historia de los Óscar.

Bjork es una artista multifacética. Ella no solo ha vendido millones de álbumes alrededor del mundo, sino que también ha sido galardonada como Mejor Actriz en el Festival de Cine de Cannes. En esta ocasión, su talento y creatividad excedieron el buen gusto.

Whoopi Goldberg es una gran actriz, pero definitivamente nadie le ha enseñado a vestirse bien. Este atuendo resulta más propio de una fiesta de disfraces que de una ceremonia de los Óscar.

Al parecer, Helena Carter se confundió de atuendo antes de ir a esta ceremonia del Oscar. Su vestido parece estar más acorde con alguna de las películas de su pareja, Tim Burton, que con esta ceremonia.

Gwyneth Paltrow nos tiene acostumbrados a vestidos hermosos y elegantes, pero en esta ocasión todos se preguntan qué fue lo que le sucedió para llevar uno de los peores vestidos de los Óscar.

La actriz británica Vanessa Redgrave ha realizado grandes películas. No en vano ha estado nominada al Oscar en varias ocasiones y se ha llevado una estatuilla por su actuación en Julia (1977). Sin embargo, la moda no parece ser una de sus pasiones.

Barbra Streisand tiene talento como actriz y cantante, pero definitivamente la moda no es para ella. Este vestido, uno de los peores de los Óscar, lo dice todo.

Celine Dion es una mujer con talento y buen gusto, por ello, no es posible encontrar una explicación a este vestido (si es que se trata de un vestido).

En cierta edición de los Oscar, Geena Davis apareció con un vestido, que si bien pudo haber acaparado la atención de los asistentes masculinos, ha sido catalogado como uno de los peores en la historia de los Óscar.

La polifacética Cher no solo ha sido reconocida en el ámbito musical, sino que también en 1987 recibió un Óscar por su papel en Hechizo de Luna. Sin embargo, además de ser recordada por su música y sus películas, también lo es por usar vestidos excéntricos y en ocasiones desatinados.