Si eres amante del chocolate sabrás que está delicioso de todas las formas, y que el mundo del chocolate ofrece posibilidades casi infinitas a la hora de elegir el tipo de chocolate. En los primeros periodos de vida del chocolate sólo existía el chocolate puro, el negro, con gran cantidad de cacao, por ello era amargo. El chocolate puro sigue siendo el principal tipo de chocolate, ¡pero no es el único! A medida que pasó el tiempo, y con la evolución de la repostería, el chocolate fue evolucionando y gracias a ello hoy en día tenemos diversos tipos de chocolate. Todos ellos deliciosos.
En la actualidad se pueden encontrar tres tipos de chocolate, cada uno con unas cualidades diferentes. Aunque lo cierto es que hace poco surgió un nuevo chocolate, con las propiedades suficientes como para ser incluido como un tipo de chocolate. ¡Estamos seguros de que este os sorprenderá!
Como ya hemos comentado, este es el tipo de chocolate clásico, el de toda la vida. El chocolate negro, o chocolate puro, tiene un alto contenido de cacao y muy poca leche. Esto provoca que sea un chocolate amargo.
El chocolate con leche es el más querido por muchos, sobre todo los niños. Este tiene un alto contenido de leche y menos cacao que el chocolate negro, por lo que su sabor es mucho más suave.
Aunque ya habrás escuchado que el chocolate blanco en realidad no es chocolate porque no lleva cacao, lo cierto es que todavía se le considera como un tipo de chocolate aunque no comparta las mismas cualidades. Este tipo de chocolate es prácticamente chocolate y azúcar.
El chocolate rubí o chocolate rosa es el tipo de chocolate más novedoso. Aunque no te lo creas su color es de procedencia natural, y por ello es considerado un tipo de chocolate. Este comparte las mismas características, y debido a la procedencia de sus granos de cacao es de color rosa y de sabor afrutado.
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